SISTEMAS DE COMPLIANCE

El compliance, también conocido como Cumplimiento Normativo, adquiere relevancia en Estados Unidos a raíz de la promulgación de la Ley Sarbanes-Oxley en 2002, como herramienta para prevenir nuevos escándalos financieros. El origen en España del compliance data de 2010, cuando se aprobó la reforma del Código Penal que incorporó por primera vez la Responsabilidad Penal de las personas jurídicas al ordenamiento jurídico español. La Responsabilidad Penal es una responsabilidad superior, en gravedad, a la civil y su objetivo no es resarcir un daño cometido, sino imponer una pena a la persona física que cometa un delito, pudiendo conllevar una privación de libertad, patrimonio u honor. A través de las reformas del Código Penal en 2010 y 2015, así como de la Circular 1/2016 de la Fiscalía General del Estado, se reconoce que las personas jurídicas también pueden ser condenadas penalmente, estableciéndose penas específicas para ellas. .

Guía de buenas prácticas para la implantación de sistemas de compliance en PYMES

Desde la introducción de la Responsabilidad Penal de las personas jurídicas en 2010 en el ordenamiento jurídico español, la incertidumbre sobre cómo se deben gestionar los riesgos penales e implementar los sistemas de compliance para evitarla supone un desafío constante para las empresas. Entre las pequeñas y medianas empresas esta incertidumbre ha sido aún mayor, debido a que el principio de proporcionalidad que establece el Código Penal y la posterior Directiva 1/2016 de la Fiscalía General del Estado no definen criterios claros que permitan determinar el nivel de proporcionalidad adecuado al diseñar e implementar el sistema de compliance.